Jardín de Infantes en un dÍa de lluvia, hora de abrir la puerta para
que entren los chicos. Chequeamos que estemos todas como siempre. (Somos un
montón y suele pasar que a alguna le pase algo a último momento).
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¿Estamos todas?.
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¡No!. Falta la chica nueva. (Era una preceptora
que había tomado un cargo por tres o cuatro días).
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Bueno, estará por llegar, se le
habrá complicado el viaje.
Abrimos y entran los chicos. (Eran poquitos porque llovía fuerte). La
suplente no aparecía...Esperamos diez minutos y seguíamos sin noticias... La
Vicerectora que estaba ese día a cargo del turno tarde la llama por teléfono.
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Hola. ¿Claudia? . (Nombre ficticio).
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Si. (Tranquilidad total...).
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Queríamos saber si te pasó algo.
¿Estás en viaje?.
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No, estoy en casa.
Era indescriptible la cara de espanto de la Vice.
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¿Cómo que estás en tu casa?.
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Y...porque llueve mucho…
La vice a punto de estallar y con la presión por las nubes le dice:
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¿Y qué tiene que ver la lluvia?. ¡Estamos todas acá!
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Ah...yo pensé que cuando llovía no
teníamos que ir...
Marcela Bortnik
Maestra Inicial
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